A principios de este mes de diciembre Stephen Curry hizo su regreso tras una lesión en la ingle que le llevó a perderse 11 partidos. Dos semanas después, Curry ha empujado a sus Golden State Warriors y los ha hecho retomar la primera plaza del Oeste (19-9), promediando durante la Week 8 30’7 puntos (atinando un increíble 57’6% de los tiros de tres), 5’3 rebotes y 5’7 asistencias. En la disputpa por la cabeza de conferencia se encuentran ahora los Oklahoma City Thunder (17-8), por delante de los descendidos Denver Nuggets (18-9) y Los Ángeles Clippers (17-10), empatados con los también angelinos de Lakers.
De esta manera, el base poco a poco vuelve a su mejor nivel de siempre y con ello la franquicia de Oakland venció en sus tres últimos enfrentamientos. 128-111 endosaron a Atlanta Hawks (6-20) donde Curry, Kevin Durant y Klay Thompson se combinaron para aportar 85 puntos; consiguieron secar a uno de los «gallos» actuales de la liga, Milwaukee Bucks (18-8), a tener su puntuación más baja del año, 105-95; y, por último, batieron fácil a los debilitados Cleveland Cavaliers (6-21) por 129-105 con el base en pleno estado de forma, 42+9+7.
En la conferencia Este, la insignia de «mejor jugador de la semana» se la ha quedado Bradley Beal, en unos días en los que el escolta ha sonado para muchas franquicias ante lo que podría ser un traspaso inminente del jugador, aunque, de momento, él niega querer irse. Los Washington Wizards se encuentran en el peor momento de sus últimos años (11-16 ocupando la 10ª plaza) y Beal podría ser una gran llave de cambio para refortalecer el equipo a tiempo.
El escolta ha promediado en esta Week 8 plagada de rumores 30 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias, reanimando mínimamente a unos Wizards que sacaron victorias en dos de sus tres compromisos. Vencieron 110-107 a los New York Knicks (8-20) con 27 puntos de Beal y 18 tantos y 15 asistencias de John Wall; superaron 131-117 a los Hawks donde el escolta se fue hasta los 36+9 asistencias y en el fin de semana tropezaron ante los Cavs por 101-116, topándose con la torre de Tristan Thompson (23+19).
Tiempo Muerto 