El Barcelona cae ante Darussafaka y prácticamente dice adiós a la competición continental. La lacra, la primera parte. El Real Madrid puede certificar su eliminación el próximo partido.
Derrota del Barcelona Lassa en la pista del Darussafaka Dogus (67-56) en un partido que era clave y en el que una muy mala imagen en la primera parte, sobre todo en el segundo cuarto (32-9), condenó a un equipo que pareció recuperar el orgullo aunque tarde, para quedar a las puertas de la eliminación matemática, mientras que el equipo turco sigue vivo en la lucha por estar en los ‘play-offs’.
Algo gordo debió decir el técnico heleno a sus jugadores al descanso, porque el Barça se dejó su indolencia en el vestuario tras la reanudación. Los azulgranas salieron con más arrojo, intensidad y determinación. Claver y Perperoglou -12 puntos entre los dos en el tercer cuarto- dieron un paso al frente y contagiaron al equipo su deseo de ganar el partido. Pero a este Barça le falta carácter y calidad para darle la vuelta a este tipo de duelos. El carácter de Batuk y el acierto de Zizic y Clyburn emergió para recuperar el colchón de las dos cifras de diferencia (59-47, min.35). Tomic y Rice no acertaron en los minutos decisivos y Perperoglou se quedó solo. Fin.
Que con más de 11 segundos por jugar un último balón Tyrese Rice decidiera ni intentar lanzar, dejando pasar el tiempo, perdiendo el equipo por 11 puntos y con una paupérrima anotación de 56 puntos en el marcador refleja la situación anímica de un Barça Lassa que, a cuatro triunfos del corte con 4 jornadas por jugarse, se despidió prácticamente de esta guisa de la Euroliga. Solo quedará la Liga.