Tras una temporada de superioridad total de Golden State, los equipos buscan tornar su dominio mejorando sus plantillas, y vaya si lo han hecho. Hemos tenido, probablemente, el verano más agitado de los últimos años en la liga norteamericana. Movimientos que nos dejan con mucha expectación y en algunos casos, con muchas dudas de cara a como se podrán acoplar las diferentes piezas en los equipos.
Sin duda alguna, tres equipos son los que más han hecho por reforzar sus plantillas. Sí, son los mimos que estás pensando y los vamos a ver más detalladamente a continuación:
Boston
La NBA también tiene sus culebrones particulares, y si alguien lo ha protagonizado este verano, ha sido Kyrie Irving. Desde principios de verano surgió el rumor de que había pedido a los Cavs su traspaso y se especuló con todo tipo de destinos posibles, cuando todo estaba calmado y todo el mundo pensaba que no se iba a mover, ¡sorpresa!, Boston traspasa a Isaiah Thomas, Crowder, Ante Zizic y una primera ronda del draft por el base de los Cavs. Quien sale ganando en este traspaso es un debate aparte, pero lo que si queda claro es que con este movimiento Kyrie tiene la oportunidad de conseguir lo que él quería con su traspaso, liderar un equipo el solo y llevarlo a las finales.
Pero Kyrie no es la única novedad en los Celtics, Hayward traspasado desde los Jazz, crea una interesante pareja que unido al veterano Al Horford, se postula como principal candidato para tumbar la hegemonía de los Cavs en el este.
Oklahoma City
Posiblemente uno de los equipos que más ganas tenemos de ver esta temporada. Westbrook necesitaba compañía y Paul George y Carmelo se encargarán de formar un trío que por el momento tiene muy buena pinta.
Pero no es oro todo lo que reluce y aunque luzca muy bien, es uno de los equipos que causa dudas. La marcha de Oladipo y Kanter debilitan una plantilla en la que también está por ver como se adapta un Carmelo de 33 años al juego.
Cleveland
Cleveland es otro equipo que ha sonado en todos los movimientos. Después de la clara superioridad de Golden State en las finales, los Cavs se veían obligados a adquirir jugadores si quieren volver a plantarle cara a los de la bahía. Su última adición, Dwayne Wade, se une a los ya adquiridos Derrick Rose, Joe Crowder, Isaiah Thomas y Ante Zizic.
Una plantilla que si las lesiones lo permiten pueden llegar a conseguir algo grande, aunque de momento empiezan con mal pie con la lesión de cadera de Thomas que se prevé que lo tenga fuera de las canchas por varios meses. Debido a esto, Rose volverá a adquirir un protagonismo en la que quien sabe si podrá ser la temporada de su resurgir.
Fuera de estos equipos con grandes movimientos, el “offseason” de la NBA también nos ha dejado con movimientos individuales que también dan muchas ganas de ver.
La nueva dupla de Chris Paul y James Harden en Houston le da incluso más emoción a una conferencia oeste cargada de superestrellas, a la que también se suma Jimmy Buttler en los Timberwolves, que junto con Karl-Anthony Towns y Andrew Wiggins pueden hacer cosas serias en Minnesota, aunque con las bajas de Ricky Rubio, Kris Dunn y Zach Lavine. El base español probará suerte en Utah donde con la marcha de Gordon Hayward se convierte en una de las principales estrellas junto con Rudy Gobert.
Uno de los equipos que más perjudicado sale son los Bulls, que con la salida de Wade y Buttler pierden dos de sus jugadores estrellas, aunque con la adición de los jóvenes Lavine, Dunn y Markkanen podrían llegar a hacer algo.
Todo esto sin contar la llegada de los nuevos rookies a la liga. Lonzo Ball tras cuajar un gran torneo en la Summer League se convierte en la esperanza de unos Lakers que buscan volver a competir. Si Ingram empieza a coger confianza y Lonzo empieza bien, puede llegar a ser un duo interesante de ver.
Por su parte, en Philadelphia, con las primeras elecciones de los dos últimos draft (Fuetz y Simmons), más Embiid y Saric podría por fin volver a buscar un puesto en playoffs. Unos sixers que no tienen suerte con las lesiones y sus rookies. Ben Simmons, jugará su primera temporada después de perderse su primer año por una lesión en el pie derecho, y, Joel Embiid, tras promediar 20.2 puntos y 7.8 rebotes por partido en 31 partidos, busca terminar su primera temporada completa después de perderse dos campañas y media por lesiones.
¡Que empiece lo bueno!