El arranque de la Euroliga para el Baskonia, se produjo con polémica, ya en el entrenamiento matutino, a puerta cerrada, donde alguien relacionado con el conjunto local, grabó el ensayo con las cámaras del instant replay y el cruce de declaraciones que se produjo tras el incidente.
Partido igualado y cimentado en las defensas, donde los victorianos supieron aprovechar la falta de acierto en el tiro de tres de los lituanos, con un primer cuarto donde Ilimane Diop (5pts) y Vincent Poirier (8pts) hicieron daño en la pintura, pese a ello los lituanos conseguían finalizar el cuarto con ventaja en el marcador, gracias al acierto en el tiro, sólo erraron dos tiros en todo el cuarto.
En el segundo cuarto los jugadores baskonistas impusieron un ritmo más alto, dificultando el ataque de los lituanos, sin Nate Wolter, máximo anotador de los locales, los baskonistas conseguían controlar el partido e irse tres arriba al descanso, desesperando el juego de los lituanos.
Tras el paso por el vestuario, los azulgrana no se relajaron y siguieron apretando el acelerador, a pesar de la ventajas generadas por Leo Westermann, llegando en dos jugadas puntuales del tercer período a los doce puntos de diferencia, con un parcial de 3-15 los victorianos se iban al último cuarto diez puntos arriba.
El último cuarto fue un paseo para Jayson Granger que anotó tres triples consecutivos, para paliar el 4-0 inicial de los locales y poner a los victorianos 17 puntos arriba, rompiendo definitivamente el encuentro. Los de Sarunas siguieron peleando con una presión en los últimos instantes de partido que les permitió situarse a 8 puntos, pensando ya en el basketaverage que les pueda servir para el top8.
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