
Desde los mejores equipos de la NBA hasta cualquier equipo de benjamines en Alicante, o cualquier ciudad donde el baloncesto se practique con habitualidad; los segundos entrenadores o ayudantes, dando igual cuál sea el nombre idóneo para esta figura en el baloncesto actual, carecen de la importancia suficiente debido a que están infravalorados por los propios clubes o instituciones, e incluso por los medios de comunicación si hablamos de situaciones de baloncesto profesional.
La definición más genérica es, según los usuarios de Internet: “El segundo entrenador o ayudante de campo es el ayudante más próximo al entrenador en los deportes de equipos. El ayudante del entrenador suele ser un entrenador con menor experiencia y más joven, por lo que se le considera de igual forma entrenador, con menos responsabilidad que el primero, pero con funciones de entrenador, que busca formarse para ocupar un puesto de primer entrenador en un futuro, aunque no siempre.”
En parte estoy de acuerdo con dicha definición, aunque siempre hay que relativizar el nivel del equipo, la categoría y la situación general del club o institución. Si hablamos de equipos profesionales de primer nivel como Liga Endesa o NBA, los entrenadores ayudantes son personas muy cualificadas que ya han sido primeros entrenadores de otros equipos o de cantera en el mismo club o en semejantes, e incluso hay casos en los que los entrenadores ayudantes compaginan sus funciones con las de primer entrenador en ligas inferiores o extranjeras, selecciones nacionales etc. Por el contrario, un entrenador ayudante en un equipo de formación sí que suele tener el perfil de persona joven, con menos experiencia que su compañero en el equipo (primer entrenador) y con interés en formarse para conseguir ser un buen primer entrenador en un futuro.
Desde mi punto de vista, la importancia que esta figura puede tener en cualquier equipo es tan grande que estoy completamente seguro de que no están lo suficientemente valorados por la sociedad deportiva actual, más en concreto en el baloncesto, con alguna excepción en equipos NBA (no todos) donde el cuerpo técnico está elegido con mucha audacia y adquieren roles mucho más importantes dentro del equipo que en el resto de clubes fuera del continente americano. Pero mi interés, como es obvio, se centra en los equipos europeos, y más concretamente en la cantera, ya que es a lo que me dedico actualmente.
El entrenador ayudante es la pieza que equilibra la balanza en el equipo, tiene que ser capaz de pensar como un entrenador (conceptos técnico – tácticos), como un preparador físico (conceptos de fuerza, core, equilibro…), como un fisioterapeuta (conceptos de movilidad, de propiocepción, elasticidad) y, lo más importante, como un jugador más. Está claro que el entrenador principal también tiene que estar presente en todos los ámbitos, pero su misión principal tiene que ver con el conjunto general del equipo, con todas las jugadoras a la vez, y por lo tanto, cuando se trata de individualizar es cuando el entrenador ayudante tiene que hacer acto de presencia, y esto ocurre varias veces durante cada sesión de entrenamiento y, por supuesto, en los partidos.
Como he nombrado anteriormente, el entrenador ayudante tiene que meterse en el papel de varios cargos, pero el que más importancia tiene para mí es el de jugador. En todos los equipos aparecen problemas internos de distinta gravedad pero que, si no se detectan a tiempo, pueden llegar a ser perjudiciales tanto para los jugadores como para los entrenadores, y es aquí donde el entrenador ayudante tiene que ser capaz de integrarse en el grupo, adquiriendo la confianza necesaria como para poder observar el comportamiento de las jugadoras y así poder estar pendiente de cambios de actitud, enfados, sensaciones de impotencia etc. Es algo que parece obvio pero que, si no se está totalmente implicado en el equipo y comprometido con el mismo y las funciones que te tocan, es muy difícil de solucionar a tiempo.
En mi caso personal, empecé mi andadura en los banquillos como entrenador ayudante en CD ADESAVI, donde me desarrollé como jugador. Empecé en el infantil femenino donde el entrenador principal era Juan Lillo. Este año empecé a entender la importancia que tiene el puesto que ocupaba, puesto que había muchos momentos donde tenía que intervenir mientras que no tenía experiencia previa y me abrumaba en ocasiones, pero una vez comprendido el rol que me tocaba todo fue a mejor, el equipo agradecía tener alguien en quien confiar a parte del entrenador al uso. En la temporada siguiente repetí puesto en el equipo, pero esta vez ya en FUNDACIÓN LUCENTUM con Hermann Nutz al mando del infantil femenino. Y ya con algo de experiencia pude desarrollar mi misión como ayudante con más fluidez y, además, adquirir la formación adecuada para mi futuro como primer entrenador. En estos dos años viví en primera persona todos los problemas que pueden aparecer en los equipos y como los mismos no se solucionan por sí solos sino que alguien tiene que intervenir, o por lo menos interesarse por ello y comunicarlo al entrenador.
Ahora como primer entrenador del junior femenino B de la FUNDACIÓN LUCENTUM, la persona que está ejerciendo de segundo entrenador conmigo, David Paredes, está siendo primordial para que el equipo esté yendo por el camino adecuado y mantiene, como he dicho anteriormente, la balanza equilibrada para que todos estemos lo más contentos posibles, tanto dentro como fuera de la pista.
En definitiva, visto lo visto, me gustaría que todos los clubes de cantera reflexionaran sobre este tema y pusieran más empeño en valorar y agradecer esta figura en todos sus equipos, ya que son una parte muy importante de todo lo que se pueda conseguir en un futuro con cada equipo.
Genial artículo. Y muy buenos argumentos para destacar la figura del entrenador ayudante y la importancia de su rol. Enhorabuena.
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Muy bien expuesto Raúl! Entiendo perfectamente cómo has vivido y sentido cada una de las etapas/funciones en las que te has visto involucrado en ese gran deporte llamado baloncesto. Tienes una mente muy bien amueblada. Felicidades y mucha suerte!!!
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