El Real Madrid consigue el decimoséptimo triunfo de la competición ante el Darussafaka. Por su parte, el equipo turco ofreció un duro encuentro frente al vigente campeón que no fue suficiente para obtener la victoria y se mantiene como último clasificado de la Euroliga.
El Madrid hizo un partido muy sólido hasta el último cuarto, y esta solidez se vio desde el inicio del encuentro en jugadores como Anthony Randolph, anotando seis puntos en los primeros compases del juego. El jugador del Madrid con pasaporte esloveno, además, estuvo bien acompanyado Gabriel Deck y Fabien Causeur que dieron a los visitantes una ventaja de nueve puntos, que fue reducida, por parte del Darussafaka, gracias a la aportación de Peiners que, con permiso de Llull, nos dejó el 16-23 para cerrar el período.
El segundo asalto empezó más tosco, con poco acierto por parte de los dos equipos. Es en estas situaciones cuando el Madrid hace gala del talento de su profunda plantilla, y a ritmo de Thompkins y Ayón sacaraon una diferencia de once puntos. Sin embargo, no todo fueron buenas noticias para el equipo de Laso, ya que, Llull tuvo que retirarse antes de tiempo por unas molestias en el abductor. A todo eso, Douglas aprovechó para acercar al Darussafaka a ocho puntos, pero fue Prepelic el que volvió a poner una diferencia de +15 para dar fin a la primera parte. (38-53)
Tras el descanso el equipo de Ernak salió con más intensidad y acierto, así lo demuestran las estadísticas en los triples, ya que en la media parte eran de 2/9 y finalizaron el partido con un 12/25. Gracias a la aportación de Evans y Douglas el equipo turco trataba de acercarse, pero nunca conseguían reducir la diferencia a menos de diez, y es que Carroll con nueve puntos en el período se encargó de que eso no sucediera.
Se perdió el control del partido
El Madrid controló muy bien los tiempos del encuentro, pero vio como todo se perdía en un par de acciones consecutivas. Una falta antideportiva señalada contra Prepelic propició dos tiros libres anotados que seguidos de un triple de Ozmizrak pusieron a tan solo seis puntos al conjunto local. Para la fortuna del Madrid, el Darussfaka no estuvo bien en los siguientes ataques, pero los blancos perdonaban mucho en la línea de tiros libres y eso daba vida a los turcos. Finalmente, Deck volvió a dar una ventaja de nueve puntos. Sin embargo, Ozmizrak con cinco tantos consecutivos y acompañado por Douglas, que acabó con 27 puntos, empataron el partido. Por fortuna visitante, Tavares puso el 82-84 y Douglas, bien defendido por Randolph, falló la última posesión. Finalmente, los tiros libres de Campazzo nos dieron el 82-86 final.
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