Lo dije unas semanas antes de la Supercopa Endesa, lo volví a repetir en la misma y me reafirmo hoy: Cory Higgins es el mejor fichaje que ha realizado el F.C Barcelona este verano. Bueno, este verano y también en los últimos 10 años. Quizás el mejor fichaje desde Pete Mickeal, que ha sido uno de los mejores americanos de la historia del club.
Sí, es fácil decirlo hoy, después de un fin de semana en el que ha anotado 13 triples de 16 intentos entre el partido del viernes pasado ante el Zalgiris y el del domingo en Sevilla contra el Betis. Pero hoy lo reafirmo, porque decirlo ya lo dije en su momento. Tiren de hemeroteca.

El Barça no tenía malos escoltas. Para nada. Kyle Kuric mejoraba en casi todo a Petteri Koponen y se sentía cómodo en ese rol de tirador, mientras que Pau Ribas era y es la IQ en persona, con, también, un gran porcentaje en el tiro exterior y esa capacidad de jugar de combo guard. Pero para competir en la élite europea y codearse con los transatlánticos, había que firmar un exterior de primerísimo nivel que marcase la diferencia. Y ese era Higgins. Tenía que ser él.
Es, quizás, hasta paradójico decir que Higgins es el mejor fichaje del Barça cuando este verano también ha aterrizado en el Palau un tal Nikola Mirotic. En cuanto a lo mediático ambos fichajes están a años luz. Un jugador que viene de ser titular en los Milwaukee Bucks y de hacer unos fantásticos números durante tantos años, eclipsa al resto de los fichajes. Y es normal. Pero centrándonos exclusivamente en lo deportivo, creo que realmente hay pocos jugadores tan decisivos como Higgins en ambos lados de la cancha.
Un fantástico defensor al que no le tiembla el pulso en ataque, capaz de asumir las bolas que más queman y con una facilidad para anotar sin amasar bola, sabiendo seleccionar bien los tiros. Por no hablar de su tremenda IQ y su carácter ganador. Un líder silencioso con hielo en las venas, el clutch que tanto necesitaba el equipo y que poco a poco va ofreciendo su mejor versión en Barcelona, pese a que algunos iluminados lo querían comparar con Chuck Eidson.

Está claro que Nikola Mirotic acapara todos los focos por diversas razones. Algunos no van a superar nunca su fichaje por el Barcelona. Tampoco creo que el Barça vaya a pedir perdón por haberlo traído de vuelta a Europa. Y aunque el regreso de Abrines me haga especial ilusión, al igual que los fichajes de Brandon Davies y Malcolm Delaney, creo que el más necesario y determinante de todos era y es el de Cory Higgins, uno de los mejores escoltas de Europa, si no el mejor. El tiempo me dará o me quitará la razón.