Tras un largo periodo de reconstrucción, el equipo dirigido por Monty Williams parece haber resurgido de sus cenizas para devolver así la ilusión a la ciudad de Phoenix.
Desde que allá por la temporada 2009/2010 disputaran las Finales de Conferencia frente a L.A Lakers (cayeron por 4 -2), el conjunto del Estado de Arizona no ha vuelto a disputar la post temporada, siendo cierto que por aquel entonces, la historia era muy distinta.
Era la época en la que un chico de Canadá reinaba en Phoenix, tratando de devolver la felicidad a una ciudad que no hacía tanto vibraba con Charles Barkley; y tanto que lo consiguió, aun no habiendo conseguido el ansiado anillo, mantuvo a los suyos año tras año en la élite de la competición americana. Durante su trayectoria en Phoenix, Nash estuvo bien secundado por jugadores como Shawn Marion, Amar´e Stoudemire, Grant Hill o Shaquille O’neal entre otros. Estábamos ante uno de los equipos a tener más en cuenta de los últimos años en la NBA, pero tras las últimas Finales de Conferencia mencionadas y la posterior marcha del base canadiense en 2012, todo se tornó oscuro.
La ciudad de Phoenix “lleva varios años de luto”, con una plantilla que tan sólo se aferra a las elecciones de Draft pero que no acaban de superar ese período de transición; aunque en ésta, la temporada 2019/2020, el equipo ha empezado de manera más que notable y parece que se empiezan a ver luces al final del túnel en Phoenix.
En un verano más que activo, con hasta diez nuevos jugadores en la plantilla y otros tantos que han salido, el movimiento clave realizado por la directiva ha sido el hacerse con los servicios del base español Ricky Rubio; el jugador que viene de ganar el Mundial con la selección, además de ser el MVP del campeonato, ha dado un aire nuevo a estos Suns, compaginándose a la perfección con Devin Booker. El base español en sus primeros 16 partidos, viene promediando 12.6 pts y 8.7 asistencias por noche, además de haber tomado a la perfección “las riendas” en la dirección del equipo.
Además de Rubio, otros jugadores recién llegados como son Baynes (14pts/5.7reb) o Fran “the Tank” Kaminsky (11pts/5reb) han sabido adaptarse muy bien, aportando y dejando buenas sensaciones en cada partido.
Junto a estos jugadores recién aterrizados en el Estado de Arizona, hay que hacer alusión a Devin Booker, quien a pesar de estar disputando tan sólo su quinta temporada en la NBA, está consagrado como una de las estrellas de la liga. El jugador natural de Michigan está promediando 25 pts por noche con unos altísimos %, además de repartir 6 asistencias.
No hay que olvidar en este pequeño desglose del equipo, a un jugador que ha dado un paso al frente esta temporada; no es otro que Kelly Oubre Jr, quien está promediando 17 pts por noche convirtiéndose así, en la segunda referencia en ataque para el equipo.
Como suele pasar, ésta buena situación del equipo tiene una cara b; apenas empezado el curso, el pívot Deandre Ayton era suspendido con 25 partidos tras haber dado positivo con un diurético en unas pruebas realizadas. La suspensión supuso un duro golpe moral para la franquicia, ya que el pívot jamaiquino era la referencia del equipo en la pintura.
Tras un inicio con 10 victorias/11 derrotas y situados en la séptima posición del Oeste, vemos a estos Phoenix Suns en una situación óptima de cara al resto de la temporada. Aun así, mucho tendrán que trabajar los chicos de Monty Williams, pero desde luego que condiciones tienen para volver a unos Playoffs a los que llevan nueve temporadas consecutivas sin acudir.
¿Están de vuelta los Phoenix Suns?