Cuarta derrota consecutiva y parece no haber mejora. Los de Prigioni remaron y aguantaron hasta los minutos finales del choque, pero los macabeos se llevaron la victoria con un Norris Cole estelar.
En caída libre. Así es la forma con la que podemos definir la situación actual de Baskonia. El equipo vasco suma su segunda derrota europea y cuarta consecutiva y parece haber entrado en barrena. A pesar de ello, se sintió capaz de discutir el partido a un Maccabi conectado desde el principio y con un perfil muy serio. El plantel azulgrana comenzó más acertado y, espoleado por una buena puesta en escena de Janis Timma, consiguió las primeras ventajas (7-13) en un choque muy físico. Granger hacía daño con las ventajas desde el poste y Rodrigue Beaubois que pudo ayudar a sus compañeros tras recuperarse de sus problemas físicos, aportaba desde el perímetro. Tras estos buenos minutos se apagó la luz de Baskonia. Llegó la desconexión y Maccabi se agigantó de una manera mortífera. El movimiento de los banquillos favoreció a los hebreos que pudieron cargar el rebote ofensivo y cerrar el primer cuarto con un parcial de 12-0.
En el segundo cuarto, más de lo mismo. Los baskonistas tenían problemas en ataque y la defensa no conseguía parar a los exteriores amarillos. Norris Cole, el mejor de los locales con 24 puntos, no paraba de surtir de balones al incansable Alex Tyus que se encontraba muy cómodo en ambos lados de la pista. El conjunto vitoriano logró finalmente frenar el parcial local de 16-0 tras casi siete minutos sin anotar, pero no ajustaron la defensa y el Maccabi alcanzó los diez puntos de diferencia con un 21-2 que dejó tocados a los visitantes.
Tras el descanso, destacó el duelo que mantuvieron Thomas y Shengelia que acabó con el capitán azulgrana en el banquillo con tres faltas personales y condicionó el juego interior visitante que no fue capaz de controlar su rebote defensivo. El marcador se fue hasta el 48-34 y Prigioni reaccionó al sacar a la pista a un eléctrico Luca Vildoza que metió otra marcha más en las transiciones y en el juego baskonista. Los triples del argentino y la buena actuación del francés Beaubois estrecharon el encuentro. Baskonia remaba y veía la orilla. Beaubois, inspirado con 10 puntos en el último cuarto de sus 22 totales, hacía soñar a los suyos. A tres minutos del final, el parcial de 2-9 dejaba un 66-64 en el marcador que helaba a “La Mano de Elias”. En el momento clave, no funcionó la defensa baskonista y Maccabi tomó aire gracias a Deshaun Thomas, autor de 17 puntos. Finalmente, los de Neven Spahija se aprovecharon de las pérdidas vitorianas y supieron controlar la renta para poder alcanzar la victoria.