El poeta romano Juvenal (siglo I), citaba en su décima sátira el famoso proverbio Mens sana in corpore sano (Mente sana en cuerpo sano), que expresa la aspiración de un espíritu equilibrado en un cuerpo equilibrado.
El deporte, además de los beneficios corporales conocidos por todos, no es un aspecto que se pueda limitar a la salud. A nivel educativo, es también una herramienta muy efectiva en el desarrollo de niños y adolescentes, pues a través del deporte “se activan todas las funciones cerebrales que son indispensables para el desarrollo cognitivo general, así cómo les enseña una serie de habilidades y conocimientos que les serán de gran ayuda durante su vida”[1]
Según José Alfonso Martín, decano de la Facultad de Educación Física de la Universidad Pedagógica de Bogotá, incluir el deporte en la educación promueve el desarrollo e integración social, genera sentido de pertenencia, forma en valores y virtudes, ayuda a la convivencia, estimula el cerebro, eleva la autoestima y reduce el estrés, entre otros beneficios.[2]
Considerando el beneficio del deporte en general, ¿cuáles serían los beneficios del baloncesto en particular?
El baloncesto es uno de los deportes de equipo con más velocidad de juego. A nivel cognitivo pues, aumenta la concentración y la atención además de fomentar la rapidez en la toma de decisiones y su posterior ejecución en situaciones problemáticas.
A nivel socioemocional, además, fomenta la autonomía de los niños, la sociabilidad y la convivencia. Los más pequeños (5-6 años), suelen tener un ego desmesurado y un sentido de propiedad elevado. Es por ello que es habitual empezar con un balón para cada uno y ejecutar tareas individuales para poco a poco introducir juegos en que varios comparten un balón con el objetivo de completar un ejercicio utilizando la colaboración mutua. Compartir objetivo común despierta en los niños la necesidad de animar a su compañero de equipo, el éxito se manifiesta viendo cómo se comparte el júbilo de la victoria o la frustración de la derrota. [3]
Además de socializar, el baloncesto aporta y fortalece lazos afectivos con compañeros, amigos y familiares de equipo. Enseña valores básicos como la cooperación, el compañerismo o el trabajo en grupo.
Compartir objetivos les hará saber cuando sean mayores, porque así lo han mamado desde minibasket, que si un defensor flaquea la defensa se desmorona. Sabrán valorar que la canasta ha venido precedida de un rebote defensivo, una transición defensa-ataque, un juego colaborativo, una asistencia y finalmente un tiro.
Si no hay trabajo en equipo, no habrá victoria. Ni en la cancha, ni en la vida.
[1] DE ACEVEDO, Annie. http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-15601949
[2] MARTÍN, José Alfonso http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-15601949
[3] LAHOYA, Rebeca. Basketball is Education. http://basketballiseducation.com/blog/11-01-2017/baloncesto-los-ninos-beneficios-formativos/5434