Quién iba a decir que los Toronto Raptors acabarían asaltando el Oracle Arena por doble partida y conseguirían así contar con tres oportunidades de poder llevarse su primer anillo. Han puesto la eliminatoria de sus primeras Finales NBA en un favorable 3-1 que les posibilita hacerse con el título en casa, y ante los grandes campeones de la época, los Golden State Warriors. El misterio por resolver es saber si el gran ausente de esta serie, Kevin Durant, jugará en Toronto, y si lo hace, con qué papel lo hará.

Por su parte, los Warriors se volvieron a encomendar en Klay Thompson (28), vital en estas Finales para su equipo, y, aunque Stephen Curry también realizó buenos números (27+4+6), nadie más destacó en San Francisco. Los de Steve Kerr se desinflaron en la segunda parte y finiquitaron el encuentro con un paupérrimo 29’6% de acierto en triples (8/27) y hasta 17 pérdidas de balón. Ahora les toca hacer algo que solo los Cleveland Cavaliers de 2016 supieron hacer, y ante ellos: remontar un 3-1 en contra en unas Finales.
1º CUARTO

Solo un Kawhi Leonard disfrazado del Curry de la noche anterior, sumaba para los suyos, terminando con 14 de los 17 puntos de su equipo. Los Warriors efectuaron un parcial de 12-2 en los últimos minutos y el cuarto acabó del lado de los locales por 17-23.
2º CUARTO

Leonard no pudo aportar puntos en este segundo cuarto mientras los secundarios de los Warriors se mostraron más activos que nunca en estas Finales, especialmente Kevon Looney en el poste bajo, realizando 8 de sus 10 puntos en esta primera mitad. Aunque los Raptors acumulaban un horrible 2/17 en tiros de tres, los Golden State no supieron aprovecharlo para abrir distancias, incluso Curry erró 5 lanzamientos triples en estos 24 minutos de juego.
3º CUARTO

4º CUARTO
En esta segunda mitad el juego canadiense estaba fluyendo con gusto, tanto es así que acabarían dando el doble de asistencias que en la primera y matando el partido muchos minutos antes del final.

Ibaka tendría que sentarse y reservarse por llevar cinco faltas, pero sus compañeros supieron sostener la renta en el marcador. Aunque Curry con un triple a tres minutos rompió la barrera psicológica de los 10 puntos (97-89), ya los segundos pasaban, la diferencia la mantenían y la defensa canadiense continuó trabajando para provocar la anotación más pobre de Golden State en estos Playoffs, 92 puntos.